lunes, 16 de marzo de 2009



No era cuestión de tirar una moneda.
Elegirnos para siempre o
abandonarnos para siempre.
El amor era posible
entre el aire que nos separaba.
Ahora voy a coserme
este cuerpo dividido
esta mujer para armar
y caminar
caminar de nuevo
hasta mí.


Foto: Melina Salman

6 comentarios:

marichuy dijo...

Melina

Hermosa esperanza de amor.

Un abrazo

Diego Sagardía dijo...

Ey, muy buena la foto y muy bueno el texto.
O sea, muy bueno todo.
Saludos

PerroDinamita: dijo...

y si nos subimos a ese coche, cargamos las mochilas en el asiento de atras, aceleramos como dos telmasandlouise y no vamos a desandar mundo??

no apto para cuerdosss ehhh...

hasta ushuaia no paro...

besoteeeee!!!

Luciana Schubmann dijo...

Bravísimo!!! Una gran alegoría, como una Aristófanes moderna, en su propio banquete humano, tratando de comprender el origen de la violencia amorosa.

Rex Mamey dijo...

a veces la suerte está ligada al amor, a veces simplemente está demás... en esta vida habrá que coserse mil veces... saludos!

Natalia Molina dijo...

toda una declaración de principios poética.
saludos! y un gustazo encontrar tu blog